Maldición que difícil es llegar a organizar la cabeza y estar despierto.
Estoy poniendo mi mayor energía en lograrlo y poder realizar todo con éxito, o al menos con lo que yo quiero dar de mi, cosa que hay que decirlo... nunca he hecho en su 100%.
La cabeza la tengo en muchas partes a la vez y comienzo a colapsar un poco, pero vuelvo a respirar e intentarlo una vez más y ahi una vez más puedo. Cada vez se agregan otras cosas que me hacen ponerme a prueba y con ánimo las veo venir, quiero poder hacer sin negarme nada... crear sin interrupción, disfrutar sin trabas y por consecuencia dormir tranquila al fín con el gozo de que nada se quedó en deseo o incompleto.
Es maravilloso y ayuda a ser generoso también con uno mismo y darse tiempitos para ser menos citadino estresado y más humanos, más armónicos y equilibrados.
Si con algunos recuerdos pudiera hacer lo mismo, sería maravilloso y poder con ello dejar de atormentarme por la melancolía o los fracasos que más han costado sanar, pero aqui vamos otra vez...
A ver como me va todo esto.
LB Valdés
1 comentario:
A-cep-ta-ción.
La clave esta en tomar el mundo como viene y hacer de el lo mejor que se pueda con las herramientas que dispongamos.
siempre es bueno leerte.
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