Hoy me hace mucho sentido un trozo de "I want it all" de Depeche Mode...
Habla de los deseos incontenibles de entregarse y de retroceder pensando en una misma persona, habla también de intentar una y otra vez, "Ven, yace a mi lado y lo intentaré" y claro ese es un estado de suplica... de sentir que no te estás lanzando porque si a asumir tus deseos, de sentir que no serán en vano y que se yo. También habla de un exigir una saciedad de deseo, pero que aún todo no es suficiente, y claro uno se vuelve más sediento dentro de un océano, eso es clásico, pero y cuando lo vivimos? cuando nos damos cuenta de que el cuerpo exige ser saciado y a la vez es un entregar desde ti, provocando así una reacción... casi como la historia de el huevo y la gallina, rota y rota.
Y claro, a pesar del plano evidentemente amoroso con el que se vincula esta canción, me es imposible dejar afuera tantos sueños que de tan soñados se vuelven deseosos e irresistibles, de cuantas veces estoy a punto de realizar y retrocedo... de cuanto pido por realizarlos cuando verdaderamente es un deseo personal y propio, bueno, y claro en el plano sentimental también, me detengo en seco cuando comienzo a pensar.
Mis deseos se detienen cuando uso la cabeza, y la verdad mi lado más cómodo y amado no es precisamente el lado sentimental. Me siento inútil, frágil, pequeña y sin voz; en cambio cuando mi intelecto domina la situación me siento fuerte e indestructible... y el amor pasa a ser deseo sin más, así como antes lo último era consecuencia de lo primero.
Es precisamente en esos momentos iluminados de intelecto en que se suman a el todo mi lado más masculino, y cuando me vuelvo un felino dulce soy tan mujer y sentimental... sé que nunca soy débil, sólo que me dejo sobrepasar.
Y pensar que todo esto me lo trae un día cansador, frío y detestable sumado a una afligida conversación con otra mujer que es casi mi alma, más el viaje en micro con esta canción en mis oídos... uno nunca termina de enterarse como se tejen las cosas, ni menos como terminan.
LB Valdés
miércoles, 21 de julio de 2010
Deseos
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