jueves, 12 de marzo de 2009

Identidad

me hicieron la gran y compleja pregunta: ¿qué te diferencia del resto?, y claro de pronto pensé en mi identidad, más... ¿¡cuál es!? creo haber podido llegar a algo:

Me diferencio por mi particular imaginación y gusto, el amor o desamor hacia mi familia y amigos. Mi volatibilidad y ser soñador, mi querer vivir escuchando y observando.
Mi entorno y mal carácter, mi poca sensibilidad en el amor y mi gran atención ante el insensible.
Mi querer cambiar el mundo simplemente hablando.
No soy penélope esperando el tren más la esperanza aferrada tengo.
El cariño particular con mis hermanos, sumandole la escasa y esquisita comunicación.
No llevo religión más mi fe es la de un monje.
El que la música, un libro y una pluma sean mis compañeros infinitos, que mi voz no se parezca ni aleje de otra voz, que no tengo alas y vuelo más que un águila, tampoco soy un puma y corro fuerte escapando bien cobarde de mis miedos e incluso de los que no tengo.
No soy confesor, más guardo secretos, soy casi el silencio.
Quizás mi nombre lo lleve la madre de mi padre, más en la memoria de ésta llevo mi idea adelante.

¿Sabes que te diferencia del resto?

LB Valdés

1 comentario:

Rodolfo Serrano dijo...

Gracias por traernos estas reflexiones... tan diferenciadoras